Cerdos y humanos (en ese orden)
Un hombre japonés que planta tomates; un ama de casa que compra un kilo de tomates y que tira a la basura uno que está podrido; la basura que contiene al tomate, se amontona en una isla; los cerdos que viven en la isla se comen la basura y dejan el tomate podrido que será...
El corto realizado por Jorge Furtado a manera de una cebolla que se va desnudando, revela la realidad social de hoy. Va desgarrando las vestiduras y por cada prenda que saca, abre un camino distinto de términos que estamos acostumbrados a escuchar pero a no pensar. Las imágenes ilustran la paradójica relación entre los conceptos enraizados socialmente y los hechos que realmente ocurren.
La isla de Flores, donde se acumula gran parte de los desechos de Río de Janeiro, podría quedar en cualquier lugar del Gran Buenos Aires. El japonés que se ve en la primera escena podría ser un colombiano, un senegalés o un argentino. Todos estamos en ese video, publicado en YouTube, que descubre cómo puede un cerdo elegir qué comer antes que un hombre.
El corto realizado por Jorge Furtado a manera de una cebolla que se va desnudando, revela la realidad social de hoy. Va desgarrando las vestiduras y por cada prenda que saca, abre un camino distinto de términos que estamos acostumbrados a escuchar pero a no pensar. Las imágenes ilustran la paradójica relación entre los conceptos enraizados socialmente y los hechos que realmente ocurren.
La isla de Flores, donde se acumula gran parte de los desechos de Río de Janeiro, podría quedar en cualquier lugar del Gran Buenos Aires. El japonés que se ve en la primera escena podría ser un colombiano, un senegalés o un argentino. Todos estamos en ese video, publicado en YouTube, que descubre cómo puede un cerdo elegir qué comer antes que un hombre.
Analía Fernández